Escapada de un día a Celestún (Yucatan, Mexico). El objetivo principal era avistar el flamingo y pajarear por el lugar. Tomé un tour con alex dzib, excelente guia de la región. Primero nos llevó a un lugar de selva baja donde hubo interesantes avistamientos. Lo mejor un colibrí esmeralda tijereta y un momoto corona azul. Despues tomamos la lancha a la ría (rio de agua salada) para dirigirnos a la colonia de los flamencos. Son como 45 min de trayecto. De repente, ves a lo lejos destellos rosas. Un rosa intenso, inaudito. Eso no pueden ser los flamencos, pensé. Estaba equivocado. Cuando te acercas, la magnitud de la colonia y la belleza de los individuos simplemente impacta. Si te gusta la naturaleza (no solo las aves) es imprescindible conocer este lugar. Odio caer en lugares comunes y en expresiones trilladas, pero es que no hay palabras para describir esta belleza. Contaba el guia que en los 70's solo quedaban 6 mil flamencos. Implementada la protección ahora hay aprox 32 mil. Una historia de exito, si consideramos lo fragil del escositema y la presión que generalmente ejercemos sobre los recursos naturales. Los lancheros autorizados para prestar el servicio en general respetan las reglas y están conscientes de la importancia del flamingo. La normativa más importante es que no deben acercarse más de 50m. Claro que hay excepeciones, tristemente, me tocó observar una de ellas, cuando un lanchero (embarcación llamada Carlos Luis Matrícula No. 3103137914-5) se acercó tanto que perturbó parte de la parvada y los flamingos escaparon volando. En resumen, valio mucho la pena la escapada de un día a celestún.
